El cohete más grande la historia, el Starship de SpaceX, despegó hoy y se elevó 39 km antes de explotar
A pesar de eso, la misión se considera un éxito ya que fue realizada precisamente para evaluar fallos. Una prueba con la que SpaceX recopilará muchos datos para sus próximos lanzamientos
El Cohete fue diseñado para llevar a 100 personas a la luna, los viajes comerciales al espacio cada vez más cerca
El Starship de SpaceX, el cohete más grande y más potente que se ha creado, explotó poco después de despegar de su plataforma de lanzamiento en Boca Chica, Texas.
Antes de desintegrarse, el primer vuelo de la nave de la empresa de Elon Musk logró pasar un punto clave: despejar la torre de lanzamiento y despegar hacia el cielo.
Fue en el punto en que el propulsor Super Heavy debía separarse de la nave cuando las cosas salieron mal. El propulsor comenzó a dar vueltas y luego hubo una explosión.
SpaceX dijo que lo sucedido fue una «desintegración rápida no programada».
Pero como señala la editora de ciencia de la BBC Rebecca Morelle, a pesar de que la compañía quería que esta prueba fuera más allá, no dirán que se trató de un fracaso.
